“El pasado y el futuro solo existen en la mente. El tiempo está en la
mente y el espacio también. La ley de causa y efecto es también un modo de
pensar. En realidad todo está aquí y
ahora y es uno. La multiplicidad y la diversidad existen sólo en la mente”.
“Cuando la mente está quieta, refleja
la Realidad. Esta Realidad es tan concreta, tan efectiva, mucho más tangible
que la mente y la materia que, comparado con ella, un diamante es blando como
la mantequilla”.
“Su búsqueda de paz mental no tendrá
fin, porque no hay tal cosa como la paz mental. Mente quiere decir
perturbación; la mente es la inquietud misma. Examínese con cuidado y verá que
la mente está hirviendo con pensamientos. Ocasionalmente puede quedar en
blanco, pero después de un rato vuelve a su inquietud habitual. Una mente
sosegada no es una mente en paz. El Ser no necesita aquietarse. Es la paz
misma, no algo que esté en paz”.
“Puedo ver, sin sombra de duda, que
usted no es lo que cree ser. Aplíquese diligentemente a desmontar la estructura
que ha construido en su mente. Lo que la mente ha hecho, la mente debe
deshacer”.
“Dese cuenta de que no hay deseos
fuera de la mente y salga de ella. Lo que yo digo es verdad, pero para usted es
sólo una teoría. Cómo puede llegar a saber que es verdad? Escuche, recuerde,
medite, visualice, experimente. Aplíquelo en su vida diaria. El camino lo lleva
a través de usted más allá de usted mismo”.
¿Cómo podemos entender eso de que el pasado, el
futuro, el tiempo y el espacio están en la mente? Empecemos haciendo unas consideraciones sobre
el pasado:
El pasado es solo memoria, recuerdos muertos que se
dinamizan cuando la atención, que es la luz de la conciencia, se posa sobre ellos.
Es una especie de baúl de recuerdos o archivo de información inerte que es
dinamizado cuando la atención se fija en él – trayéndolo al presente temporalmente;
es decir dándole vida momentánea.
pasado + atención = sensación de
existencia.
Mientras el pasado
es solo recuerdo de lo que ya pasó, el futuro es la anticipación de algo que no
ha ocurrido aun, o sea, que ni el pasado ni el futuro tienen existencia propia.
Existen solo en la mente.
En cuanto al
espacio y el tiempo, también son subjetivos, no se pueden ver ni tocar; es
decir, están en la mente, son solo una idea, una forma de pensar.
En la segunda cita,
Maharaj dice que cuando la mente está quieta, refleja la Realidad. Ahora bien,
es extremadamente inusual que la mente esté lo suficientemente tranquila para
que esto ocurra. En mi opinión las visiones, revelaciones, epifanías etc., que
suceden a algunos individuos de forma excepcional, ocurren justamente cuando la
mente se olvida de sí misma, permitiendo
un atisbo espontáneo de la Realidad.
En la tercera cita,
Maharaj parece aludir a este mismo fenómeno cuando dice que la tónica de la
mente es la inquietud, aunque excepcionalmente pueda estar en blanco. Aquí
Maharaj añade un dato muy significativo: el Ser no necesita aquietarse. Es la
Paz misma, no algo que esté en paz. Mente = perturbación ; Ser = Paz. La mente aparece
en el Ser, no el Ser en la mente.
En la cuarta cita,
se nos aclara que, aunque la mente es el principal obstáculo para la auto-realización,
hay un uso correcto de la mente: examinar su propio funcionamiento y desmontar
aquello que la contamina: deseos, temores, apegos, preocupaciones, etc. sin que
eso afecte las funciones prácticas que le son propias: aprender, solucionar problemas,
etc.
Finalmente, la
última cita nos dice cómo podemos comprobar la veracidad de las palabras de
Maharaj: escuchando, meditando, sopesando, experimentando, etc. “Solo escucharme no le ayudará mucho, debe
usted guardarlo en la mente y darle vueltas, tratando de comprender el estado
que me hace decir lo que digo”.